La inteligencia artificial ya no es solo una palabra de moda; es una fuerza que está moldeando economías, sociedades y el propio tejido de la gobernanza. Mientras el Congreso debate un amplio proyecto de ley tecnológico, ha surgido una pregunta central: ¿Quién debería tener el poder de regular la IA, los estados o el gobierno federal?
Recientemente, la Cámara aprobó lo que se ha denominado el “gran y hermoso proyecto de ley”, pero su recorrido por el Senado ha sido todo menos sencillo. En el centro de la controversia está una disposición que impondría una moratoria de 10 años para que los estados promulguen sus propias regulaciones de IA. Esto significa que, durante una década, solo el gobierno federal podría establecer las reglas sobre cómo se desarrolla y utiliza la IA en todo el país.
¿Por qué la moratoria?
Los defensores de la moratoria, incluido el presidente de la Cámara, Mike Johnson, argumentan que un enfoque federal unificado es esencial para que Estados Unidos se mantenga competitivo en la carrera global de la IA. Temen que un mosaico de 50 leyes estatales diferentes pueda sofocar la innovación, crear confusión para las empresas y ralentizar el progreso. La Casa Blanca también ha respaldado este enfoque, enfatizando la necesidad de un régimen regulatorio moderado y favorable a la innovación.
El argumento de los derechos estatales
No todos están de acuerdo. La representante Marjorie Taylor Greene y varios senadores han expresado una fuerte oposición, calificando la moratoria como una violación de los derechos estatales. Argumentan que los estados deberían poder proteger a sus residentes de posibles daños de la IA, como los deepfakes o las violaciones de privacidad, especialmente si las regulaciones federales se quedan atrás respecto a los avances tecnológicos. Para estos legisladores, la capacidad de actuar localmente es una línea roja innegociable.
Obstáculos procesales y drama político
El debate no es solo filosófico, también es procesal. La Regla Byrd del Senado, que limita lo que puede incluirse en proyectos de ley relacionados con el presupuesto, podría obligar a eliminar la moratoria de IA si se considera que no está relacionada con el gasto federal. Senadores como Ted Cruz ya están trabajando para reescribir el proyecto de ley y hacerlo conforme, mientras que otros, como Ed Markey, se preparan para desafiar la disposición en el pleno del Senado.
Mientras tanto, el Comité de Comercio del Senado ha propuesto cambios que vincularían el cumplimiento estatal con la financiación federal de banda ancha, añadiendo otra capa de complejidad. Con una mayoría muy ajustada en ambas cámaras, cada voto cuenta, y el destino del proyecto de ley —y de la moratoria— está en juego.
¿Qué está en juego?
Este debate va más allá de las tecnicidades legales. Se trata de cómo Estados Unidos gobernará una de las tecnologías más transformadoras de nuestro tiempo. ¿Debería priorizarse la innovación sobre el control local? ¿O necesitan los estados la flexibilidad para abordar riesgos y oportunidades únicos?
Conclusiones prácticas:
- Manténgase informado sobre cómo votan sus representantes estatales y federales en temas de IA.
- Si tiene preocupaciones sobre la IA en su comunidad, comuníquese con sus legisladores locales.
- Esté atento a las actualizaciones mientras el Senado debate y enmienda el proyecto de ley; las disposiciones clave podrían cambiar rápidamente.
Resumen de puntos clave:
- El Congreso debate si los estados o el gobierno federal deberían regular la IA.
- Una moratoria de 10 años sobre la regulación estatal de IA está en el centro de la controversia.
- La Regla Byrd del Senado podría forzar cambios en el proyecto de ley.
- Los legisladores están divididos entre apoyar la innovación y proteger los derechos estatales.
- El resultado moldeará el futuro de la gobernanza de la IA en Estados Unidos.